José Ángel Solorio Martínez
El partido Movimiento Ciudadano, está implosionando a nivel estatal –Tamauipas– y a nivel nacional: el gobernador de Jalisco, Enrique Afaro Ramírez, entidad costituida en uno de los sitios de mayor potencia del MC, por su fortaleza demográfica y económica del país, tiene un pie fuera de esa organización política.
Se queja de lo poco serio que es su partido y anunció su virtual retiro del movimento naranja.
Declaró a la prensa, fijando una posición que parece irrductible:
–Haber hecho de la politica una broma como fue para mí el concepto de #FosfoFosfo, que pasó de destapes con cerveza a despedidas con rímel…
¿Cómo celebrar que le ganamos al PRI?, no voy a ser parte de un partido que encuentra en la mediocridad una forma de seguir subsitiendo.
Alfaro, se llevó entre las patas a Dante Delegado dirigente nacional del MC y al gobernador de Nuevo León, Samuel García y a su esposa Mariana Rodríguez.
El escenario para los naranjas, es sombrío.
Cuando se esperaban festejos por el mediano papel que jugó el candidato presidencial Maynez, aparecieron los diferendos. Graves, muy graves contradicciones.
El gobernador jalisience, desfonda a Samuel; lo baja, de precadidato presidencial que fue, a un politico frívolo, superficial y de estatura política mediana. Y de pilón, le propinó un zape a la infuencer que soñó con ser candidata a gobernadora.
De igual forma, le pega un duro puntapié en el trasero a Colosito, el otro engendro político que pretende vendernos la sangre de su padre a precio de oro: quiere que lo votemos para convertirse en presidente de la república.
El niño naranja, es tan cándido en asuntos de politica, que rompió con Samuel, a quien le debe buena parte de su trriufo como alcalde; Donaldito, ha pasado parte de su vida, defendiendo a los asesinos de su padre.
Tuvo que salir el presidente, Andrés Manuel López Obrador, a rechazar el indulto promovido por Colosito para el asesino material del candidato presidencial del PRI.
¿Así, o más podrido el MC?
Si el PAN, está en un trayecto de caída libre, el MC, resultó ser un efímero fenómeno electoral. Ni la rolita de Maynez, que tantos votos jóvenes le acercó puede considerarse un éxito.
Todo se derrumbó para los naranjas.
De un solo golpe, se fueron al vacío dos gubernaturas –que tanto presumía Dante– que por años sirvieron de combustible y de gancho para concretar alianzas con políticos escurridos de diferentes partidos politicos que le apostaron a los candidatos de Delgado -el naranja, porque hay otro guindo- y su partido para buscar la construcción de una tercera vía de ascenso a cargos de autoridad.
Es muy probable que el enfado de Alfaro con Dante, sea por el reparto del gobierno estatal. Delgado no es un politico de acrisolada honestidad –estuvo preso en Veracruz por malos manejos del erario– y cobra como cualquier empresario que renta sus franquicias.
El MC, apenas inicia su proceso de liquidación.
Samuel y Enrique, son apenas pequeñas muestras de las vergüenzas que vienen.
Falta la caída en el Congreso de la Unión de fuerza emergente, de partido armella con sus diputados; MORENA tiene sobrada la Mayoría calificada. Es decir, los congresistas naranjas, que pretendían venderse caros con la IV T –de no haberse logrado el Plan C–, perdieron esa oportunidad.
Más claro: el MC, tomó su verdadero nivel, pasando de opositor obsequioso a una entidad pública llena de pus.
(En similar situación, están los anaranjados en Tamaulipas).
